lunes, agosto 08, 2016

Movimiento Popular rechaza intento de derogación de la Ley de Semillas por la AN


Movimiento Semillas del Pueblo, investigadores, estudiantes, productores y comuneros se pronunciaron en rueda de prensa para rechazar cualquier intento de derogación de la Ley de Semillas por la Asamblea Nacional.

El diputado del Bloque de la Patria por el estado Vargas, Ares Di Fazio; la Bióloga molecular, investigadora del IVIC, Yaheli Fuenmayor; la militante del Movimiento Semillas del Pueblo, Eisamar Ochoa y la integrante de la Red de Escuelas Agroecológicas, Yetzi Torres, fueron los voceros encargados de leer el comunicado que respalda plenamente nuestra Ley de Semillas.

Manifestaron que bajo el amparo de esta Ley, es posible producir semillas libres y campesinas, protegerlas y multiplicarlas desde la organización popular. Al mismo tiempo destacaron que permite y promueve la investigación y producción de semillas, así como su certificación. De esta manera, las formas de producir semillas, ahora pueden convivir en justicia bajo sistemas diferenciados.

La Ley de Semillas hoy está amenazada, el movimiento popular venezolano cree firmemente que vienen por la Ley de Tierras, la Ley de Trabajadores y Trabajadoras, la Ley Especial de Protección al Deudor de Vivienda, las Leyes del Poder Popular y otras leyes y conquistas del pueblo.

El diputado Ares Di Fazio destacó “para la burguesía, la alimentación es un negocio, para nosotros un derecho humano, la Ley de Semillas es garantía de soberanía alimentaria, por ello la defenderemos en cualquier espacio”.

Por su parte, Yaheli Fuenmayor, investigadora del IVIC mencionó que el tema de los cultivos transgénicos representan muchos intereses económicos para quienes tienen la capacidad de manipularlos y crearlos.

Fuenmayor enfatizó que “la liberación al ambiente de semillas modificadas genéticamente han dejado consecuencias catastróficas no sólo a nivel socio-económico, pues hacen ricos al 1% de la población, a nivel ecológico han destruido la diversidad biológica, también atentan contra la salud humana”.

La investigadora informó que estudios revelan que en los últimos 20 años en EEUU a partir del uso de Organismos Genéticamente Modificados (OGM) se ha incrementado de manera exponencial diversos tipos de cáncer, enfermedades gastrointestinales, renales y hepáticas. En ese sentido afirmó que el uso de cultivos transgénicos ha sido tomado a la ligera por entes reguladores y empresas que los promueven.

Por otra parte, Eisamar Ochoa, integrante del Movimiento Semillas del Pueblo dijo que este instrumento legislativo es producto de la construcción popular, el debate diverso y el consenso, además de representar una propuesta inédita para el mundo y la región, cualquier intento de modificación, reforma, o derogación será en vano, “no es una ley de papel, la Ley de Semillas esta territorializada en las comunidades que históricamente luchan por el acceso a la tierra, por su cultura y soberanía”.


Los voceros rechazaron absolutamente los intentos de derogación de la Ley de Semillas por parte de grupos empresariales en conjunto con la Asamblea Nacional.




A continuación comunicado: 



Defender nuestras semillas es defender nuestro alimento, soberanía y vida

Por. Movimiento Semilla del Pueblo

La defensa de la Ley de Semillas es en si la defensa de las semillas que garantizaran la diversificación de la producción, el alimento de nuestras familias y en definitiva nuestra soberanía. Garantizando la producción de semillas en nuestro país, avanzamos en transformar nuestra economía de forma sostenible, produciendo con la calidad que queremos para nuestros alimentos, generando sistemas entre nosotros mismos que garantizan la llegada de insumos y la salida de nuestros alimentos.
Bajo el amparo de esta Ley se pueden producir semillas libres y campesinas, protegerlas y multiplicarlas desde la organización popular, pilar de nuestra lucha. Pero, al mismo tiempo esta Ley permite y promueve investigar y certificar semillas en laboratorios. De esta manera las dos formas de producir semillas ahora pueden convivir en justicia, bajo un manejo o sistemas diferenciados. En este sentido, el sector semillero crece en diversidad y crece en calidad.
Entendemos que producir es poner en práctica lo que hemos aprendido por miles de años, seleccionar las mejores semillas según nuestra experiencia acumulada, es sembrarlas con la calidad que necesitamos que tengan nuestros alimentos, también es innovar tecnologías y vender, comprar e intercambiar de forma justa.
La defensa por nuestras semillas locales, campesinas, indígenas y afrodescendientes, pasa por la defensa de la organización popular y las relaciones sociales que se vinculan a ella desde la producción hasta el consumo de alimentos, la Ley de Semillas constituye la herramienta para tal fin y su defensa en el contexto de guerra actual es fundamental, en el marco de la ofensiva de la derecha nacional e internacional imperialista que atenta contra los logros del chavismo y el proceso de la Revolución Bolivariana, cuyo ataque se enfoca principalmente en el bloqueo de alimentos para nuestras familias.
Es así como nuestra lucha abarca la defensa de los logros populares de nuestra Revolución Bolivariana, porque hoy es amenazada la Ley de Semillas, pero sabemos que vienen por la Ley de Tierras, la Ley de Trabajadores y Trabajadoras, la Ley Especial de Protección al Deudor de Vivienda, las Leyes del Poder Popular y otras leyes y conquistas del pueblo. Nos pronunciamos también contra la intentona privatizadora de los recursos del pueblo y de las empresas recuperadas, que si bien nos han alimentado la cultura rentista, contradictoriamente, han sido la base económica que nos ha permitido avanzar por una sociedad más justa y soberana.
Saludamos a los pueblos del mundo que vienen andando en la misma lucha por las semillas, el alimento y la vida y a los gobiernos que se han atrevido a irrumpir en ese orden hegemónico mundial del mercado agroalimentario como Rusia, que ha demandado públicamente sobre las amenazas de los Organismos Genéticamente Modificados.
Hacemos un llamado a la población venezolana a reconocernos en la adversidad, que no quepa duda, somos hoy más que nunca y frente al actual reto, chavistas, anticapitalistas y antimperialistas.
La Ley de semillas llegó para mejorar las condiciones de vida de agricultores y consumidores, dignificar nuestra producción y defender nuestra soberanía.
Ley de semillas, Ley de todas y todos.

¡NI UN PASO ATRÁS, VENCEREMOS!

jueves, julio 14, 2016

PRONUNCIAMIENTO INTERNACIONAL EN SOLIDARIDAD Y DEFENSA DE LA LEY DE SEMILLAS EN VENEZUELA




En el marco de la consolidación del modelo agroecológico como garantía de la soberanía alimentaria, el rescate y resguardo de de los saberes ancestrales y la biodiversidad y el buen vivir de nuestros pueblos, nos pronunciamos en defensa y solidaridad de la Ley de Semillas parida desde el movimiento popular de la República Bolivariana de Venezuela que ejerce su derecho en la participación protagónica en la toma de decisiones políticas y estructurales.

Nuestro pueblo viene padeciendo las embestidas del neoliberalismo y agronegocio que hoy como siempre amenaza la vida y la seguridad de todo cuanto en el planeta habita. Venezuela, hoy, resiste ante la amenaza de la derecha monopólica, corporativa nacional e internacional que busca la derogación de la Ley de Semillas, para seguir sometiendo este país a la dependencia política y alimentaria. Frente a esta amenaza, reconocemos en la agricultura familiar, campesina, indígena y afrodescendiente la esperanza para acabar con el hambre en el mundo y enfriar y recuperar nuestro planeta, en ese sentido, desde el taller de Soberanía alimentaria, agroecológica y metodología de campesino a campesino, respaldamos al movimiento popular venezolano, a su Ley de Semillas, a la Revolución Bolivariana y su decisión libre y soberana de construir el ecosocialismo del siglo XXI.

Rechazamos cualquier pretensión de injerencia imperial en nuestros territorios, los golpes de estado parlamentarios, la criminalización de nuestras luchas, la persecución y muerte de nuestros líderes y liderezas y a los tratados de libre comercio. Asimismo, nos sumamos a la alegría del hermano pueblo colombiano en los recientes avances por la paz.

¡Globalicemos la lucha, globalicemos la esperanza!

Centro Integral de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños ANAP, Municipio Guira de Melena, Provincia de Artemisa, Cuba.
Año 58 de la Revolución.
A los 25 días de junio de 2016. 

Suscriben 30 organizaciones y 17 países de Latinoamérica y el Caribe:

Movimiento Sin Tierra-Brasil
Movimiento Comunitario Alfa y Omega-Perú
Instituto Universitario Latinoamericano de Agroecología IALA-Venezuela
Instituto Universitario Latinoamericano de Agroecología IALA-Paraguay
Confederación de Trabajadores de la Economía Popular-Argentina
Movimiento Nacional Campesino Indígena- Argentina
Movimiento Evita-Argentina
Coordinadora Nacional Agraria/Congreso de los pueblos-Colombia
FECORACEN-El Salvador
PCN/AMUC/ECOBRA-Colombia
Organización Boricua-Puerto Rico
ANAMURI-Chile
CONAPROCH- Chile
Escuelas Agroecológicas Populares-Venezuela
Campana Venezuela Libre de Transgénicos-Venezuela
Movimiento Semillas del Pueblo-Venezuela
Comuna Río Apure/Red de Comuneros-Venezuela
Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora-Venezuela
Colectivo Agropolítico Abyayala-Venezuela  
Confederación Campesina Conamuca- República Dominicana
Federación Nacional Sindical Unitaria Agropecuaria-Colombia
CONAVIGUA-Guatemala
Central Nacional de Trabajadores del Campo CNTC-Honduras
Asociación Regional de Comunidades Organizadas ARCO/ Escuela de Formación Política de noroccidente-Honduras
CONFEUNASSCE-Ecuador
AZAPILA-Costa Rica
Asociación Nacional de Agricultores Pequeños- Cuba
Unión Campesina Panamá- Panamá
Escuela Obrera Campesina-Nicaragua